¿Sabías que una de las plantas medicinales más antiguas del mundo es el neem?
Parece que la naturaleza nunca dejará de sorprendernos, cuando creemos que lo hemos visto todo, aparece un nuevo descubrimiento que conquista nuestra atención. Pero en realidad, mucho de lo que creemos “nuevo descubrimiento”, no es tal, sino que se trata de milenarios remedios naturales que siempre han estado disponibles para quienes se atrevieran a utilizarlos.
El neem es uno de esos elementos naturales que han estado disponibles desde la antigüedad, precisamente en una región que ha explotado al máximo sus beneficios, la India.
El árbol del neem y la India llevan mucho tiempo unidos, la antigüedad de este potente descubrimiento en la región data de más de 2.000 años y por ello, el uso y aplicación de este elemento natural, tanto en la medicina tradicional hindú, como en ciertos cuidados estéticos, ya forma parte del conocimiento popular en la región.
A este árbol se le suelen atribuir definiciones como “farmacia del pueblo”, “árbol milagroso” o “árbol sagrado” y es en esta última apreciación, donde podemos entender la importancia que posee este elemento para el pueblo hindú.
Nim, como también se conoce al árbol del que hoy estamos hablando, posee un nombre científico, azadirachta índica, este término se divide en azad-libre, dirakht-árbol e i-hind-de origen indio, por lo que también se suele denominar al nim como “árbol libre de la India”.
Las múltiples ventajas de neem se guardaron en secreto por mucho tiempo en la India, pero en las últimas décadas, este potente descubrimiento comenzó a cobrar repercusión y una vez comprobada la eficacia de las propiedades de este árbol, el cultivo de este se introdujo en diversos países, siendo hoy más reconocido que antes, aunque todavía, no explotado del todo.
Son muchos los productos que se han creado en base al extracto de neem, muchos de ellos hoy son comercializados por diversas compañías dedicadas a introducir este remedio natural en los mercados más competitivos, como el americano o el europeo por ejemplo, pero lo concreto es que todavía los productos que han sido elaborados gracias al nim, no han alcanzado una masividad descomunal.
Entre los elementos que mayor relevancia han cobrado, podemos destacar: el aceite de uso externo, las hojas deshidratadas para infusión, la pasta dental con neem, los ungüentos y las cápsulas.
Las proyecciones a futuro son realmente prometedoras para este maravilloso árbol, y no sólo estamos hablando de lo que sucederá con el nim en la India, puesto que allí esta planta ya se ha consolidado popularmente como una verdadera solución integral para la salud. A lo que estamos haciendo referencia es a lo que está comenzando a suceder en regiones como Asia, África, América, parte de Europa y Australia.
En Estados Unidos por ejemplo, según un informe elaborado por el Comité Nacional de Investigación, el azadirachta índica-nim se constituye como una de las especies vegetales más prometedoras, por los beneficios que es capaz de ofrecer a todas las personas, tengamos en cuenta que prácticamente no se registran contraindicaciones, aunque claro, como todo consumo, debe darse con moderación.
Es importante destacar que parte de lo que hace del nim un recurso tan atractivo, son sus diversas áreas de actuación, sumado a la utilidad hallada en cada una de sus partes. Desde la corteza del árbol de neem, hasta sus hojas, semillas o el aceite que brinda la planta, todo es utilizable para la elaboración de algún producto, lo que lo convierte en un elemento sin desperdicio alguno, porque cada sector en él es aprovechable.
Debemos dejar en claro que el nim es el árbol de la India y nunca dejará de serlo, porque de hecho, es originario de esta región y ha sido el ayurveda, el sistema médico hindú, el que ha impulsado el uso de este elemento natural para el tratamiento de diversas enfermedades. En la actualidad, en centros de salud de la India se utiliza para tratar a enfermos con infecciones, para fortalecer el sistema de defensa de los pacientes, para limpiar el organismo y proteger la función intestinal, atenuar problemas cardiovasculares o simplemente, para el tratamiento de diabéticos.
Como dijimos antes, lo que se espera a futuro de este árbol es mucho más de lo que ha dado hasta ahora, desde Naciones Unidas (ONU) lo han catalogado como “el árbol del siglo XXI” y esto nos indica que el conocimiento acerca de su eficacia ya es un hecho para los líderes mundiales.
Es importante agregar que además del uso de esta planta para cuidados de salud o estéticos, el nim permite la creación de fungicidas, insecticidas y fertilizantes, es utilizado en la medicina veterinaria y es considerado un purificador del aire, con lo cual, tiene un gran valor para los protectores del medio ambiente por su poder para combatir la contaminación.
Con todas estas características, el árbol de la India es indudablemente, el árbol del futuro que ya ha llegado.